
En Guatemala, el fútbol amateur tiene su propio encanto y desafíos únicos. Una cancha con un evidente declive, arcos de madera y una mezcla de tierra y césped es el escenario perfecto para la pasión futbolera. Lo mejor: ¡las líneas estaban impecablemente marcadas! Este es el auténtico “inclinaron la cancha”. Un recordatorio de que no…