
En medio de la euforia por la reciente victoria del Liverpool en la Premier League, Alisson Becker y Andrew Robertson protagonizaron un emotivo gesto que se ganó el corazón de los fanáticos: invitaron a los recogepelotas de Anfield a sumarse a la celebración.
Lejos de las cámaras y los focos que suelen apuntar a las grandes figuras, los jóvenes que colaboran jornada tras jornada desde el costado del campo fueron parte del festejo como uno más del equipo.
Una muestra de humildad y conexión con el alma del club que refuerza el espíritu familiar de los Reds.
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