
Una escena quedó grabada en la memoria de los hinchas y el vestuario parisino: la charla directa y frontal de Luis Enrique a Kylian Mbappé, donde el DT español le pedía algo más que goles.
“No alcanza solo con tu talento. Tenés que sacrificarte por el equipo“, fue el mensaje que Luis Enrique le transmitió al crack francés en una de las tantas conversaciones privadas que luego se hicieron públicas por su impacto. La idea era clara: si bien Mbappé es uno de los delanteros más desequilibrantes del mundo, para ser un jugador completo debía involucrarse también en el esfuerzo colectivo, la presión alta y la recuperación.
La charla no fue un reto, sino una invitación al crecimiento. El entrenador buscaba convertir a Kylian en un líder total, no solo por sus goles, sino por su entrega en cada sector del campo. Y si bien al principio generó sorpresa, con el tiempo el propio Mbappé reconoció que ese empujón fue clave para evolucionar como futbolista.
Leé también Genial publicidad de la marca de la pipa, con Mbappe, Vinicius, Haaland y Ronaldinho